Hay dos mujeres muy diferentes en mi particular simbolismo literario. Y a ambas les corresponde la L.
L de Lucy.
Lucy Snowe y Lucy Westenra.
La virgen sabia y la virgen imprudente.
Lucy Snowe es la protagonista de Villette de Charlotte Brontë, un peso pesado del recato y la voluntad.
Sin familia ni amigos, Lucy deja Inglaterra para colocarse como profesora en un internado del continente. Pero, aunque aparentemente tímida y discreta, su corazón duda entre el Dr. John y monsieur Emmanuel, por el que finalmente se decide para verlo marchar a hacer fortuna. ¡Pobre Lucy! Siempre esperando, estoica.
Lucy Westenra es todo lo contrario. Joven, guapa, acaudalada y amada, no tiene bastante con tres caballeros victorianos y se convierte en la primera inglesa vampirizada por el Conde Drácula. Su natural coqueto y juguetón, se torna pura voluptuosidad y hechizo gracias al poder de la sangre de Drácula.
Demasiada acción para una dama. Acaba decapitada y con la boca llena de ajos.
El libro de Villette, le tengo muy pendiente...me espera, en la estantería desde hace años. Lo compré, porque son libros que luego son difíciles de encontrar. Espero leerlo lo antes posible:)
ResponderEliminarQué bien que hasta te hayas acordado de Vielltte. A mí Lucy Snowe, con todo, también me cae bien y es que Villette es tan, tan bueno. Una pena que sea el último (completo) de Charlotte... la de historias que se le quedaron en el tintero a la pobre :(
ResponderEliminarMaría, decídete, ya verás que joya.
De la primera no opino, no he podido conseguir ese libro :( Lamentablemente por estos lugares algunos autores son difíciles de conseguir.
ResponderEliminarEn cuanto a la segunda, siempre me llamó la atención, desde mi etapa vampírica. Además que comparto el nombre :)