La autora. |
Gracias a la mesa de novedades viejunas de mi librería de cabecera.
Gracias, muchas gracias, a Hoja de Lata por nacer y ofrecernos este dulce.
Gracias, gracias, gracias a Elinore Pruitt Stewart por escribir esas cartas a la señora Coney, a la que deja en Denver para construirse una nueva vida en las tierras vírgenes de Wyoming.
Una viuda con una niña de 2 años que pasa de lavandera a ranchera con alegría y trabajo a partes iguales, dejando constancia por escrito de sus aventuras...una lectura deliciosa 100 años después de su publicación. Eso es un clásico.
La editorial anuncia que a esta pequeña maravilla le seguirá su continuación, Letters on an Elk Hunt, que espero con impaciencia...estoy deseando saber más cosas de la vida en el rancho de Wyoming, los fabulosos paisajes que lo rodean y, lo que es aún mejor, de los maravillosos vecinos de los Stewart.
Impagable Zebulon Pike, su Romántica ( si, con R mayúscula) historia y su vida aislada hasta la culinaria llegada de Gavotte, las fantásticas señoras O'Shaughnessy y Loderer, las estrambóticas hermanas Sedalia y Regalia...nada tiene desperdicio.
Cuatro sencillas pinceladas y se plantan ante el lector los más hipnóticos personajes que he encontrado en mucho tiempo, enmarcados por un paisaje que prácticamente puedes oler.
Una lectura más que recomendable para compensar unas vacaciones sin viaje.
Simplemente, espléndida.
Elinor Pruitt Stewart y su esposo (anteriormente, empleador), el señor Stewart También disponemos de la versión cinematográfica de Elinor, llevada al cine en 1979, Heartland , con Conchata Ferrell dando vida a semejante heroína. |